Este es mi loquito, Sawyer. Labrador chocolate de 2 años y 9 meses.
Os expongo toda la historia de Sawyer.
Con 3 meses su primer sueño se deshizo de él y nos lo quedamos. Era un labrador chocolate gordito y muy vago jajajaja. Estaba acotumbrado a quedarse solo, nunca ha habido estrés por separación.
En mi barrio hay muchos perros, enseguida se socializó con muchos perros (a lo loco, como os podéis imaginar).
A los 4 meses largos empezó a hacerse daño en la pata delantera izquierda, a los 5 fuimos al traumatólogo y a los 6 le operaron de displasia de codos

. Un mes y medio de recuperación y cuando parecía que todo había terminado resultó que el cúbito había cerrado la línea de crecimiento y el radio no, por lo que tuvo radio curvo en ambas patas delanteras (caminaba casi con los carpos).
La consecuencia fue otras dos operaciones muy agresivas. Estuvo hasta el año y medio bajando para hacer sus necesidades, olfatear y jugar con nosotros a buscar pienso en el césped para calmar un poco su energía; también lo llevamos a hacer hidroterapia así lo trataban de su escasa musculatura en el tren delantero (el tren trasero lo tiene mega potente al haber caminado a dos patas durante un año) y gastaba parte de la energía contenida y acumulada.
Cuando empezó a hacer vida normal, imaginaos cómo se acercaba a saludar!!!! Madre mía, como un obus con sus 37 kilos!!!!
Le han regañado mucho otro perros, alguno le ha mordido pero nada grave.
Olvidé decir que en la última operación de radio curvo lo castramos, por si montaba a alguna perra no trasmitiera su displasia de codos.
Pese a todo esto, siempre ha sido un perro muy feliz y alegre, un loquito muy bruto.
A principios de este verano ( con dos años y tres meses) empezó a gruñir a algún macho que no conocía cuando lo saludaba.
Él quiere saludar a todos los perros, con su delicadeza natural jajajaja . Hemos trabajado con él lo de acercarse más despacio pero en el último metro ya no se controla.
En verano estuvo en la casa del pueblo, yendo a la playa un día sí y otro no y pasando el día en la calle como buen perro cotilla qué es; allí apenas hay perros. Y a la vuelta del verano sigue queriendo saludar a todos los perros, pero cuando es un macho de tamaño mediano/grande se pone que parece que se lo quiere comer.
Desde las operaciones Sawyer es un perro nervioso en la salida de la tarde noche (en los otros paseos parece un perro distinto, tranquilo, sin tirar y a su rollo olfateando todo) que es cuando se junta con sus amigos.
Sus amigos son todo hembras con un carácter muy fuerte a las que hay que controlar porque no les gustan los perros “nuevos”. Lo digo porque no sé si esto habrá influido en el cambio de comportamiento de Sawyer para con los machos que no conoce ( y si son ppp, más tonto se pone mi perro)
Me da mucha pena que se comporte así porque él solo quiere jugar y ahora hay que andar con mil ojos para que no pase nada (nunca ha pasado nada, pero ladra mucho, se eriza y tira como un loco). A los perros pequeños los quiere oler aunque le regañen y Sawyer no responde a sus ladridos ni nada.
Un dato más, si Sawyer está jugando con una pelota o frisbi no hay ningún problema con ningún macho que se acerque. Si está jugando en la playa, se tensa pero se va al agua a seguir jugando. Si se acerca un macho ladrando, se queda paralizado, se deja oler y como mucho le huele con desconfianza.
El veterinario dice que está en esa edad de medirse, que siga haciendo ejercicios de control y que se le pasará.
Consulté a un etólogo y me dijo que con el autocontrol podría corregirse, pero no me dio pautas hasta que no aceptase su presupuesto de 370€ por 5 sesiones ( ahora me viene un poco mal este desembolso, pero lo haré si es necesario).
Lleva un par de semanas mejor, premiándolo cuando se comporta bien y cuando es capaz de parar tras reaccionar así; empieza a ignorar a muchos perros y a conformarse con olerlos y observarlos a una distancia prudencial.
¿Algún consejo o recomendación, por favor?
Enviado desde mi iPhone utilizando Tapatalk